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Accidentes de tráfico: ¿quién se encarga de cubrir los gastos médicos?

Cuando un accidente de tráfico es de cierta magnitud puede llegar a ocasionar heridos. Ante este tipo de siniestros son las compañías aseguradoras o el Consorcio de Compensación de Seguros quienes se hacen cargo de pagar la atención de los equipos sanitarios para la recuperación de las lesiones, ya sean leves o graves.

Para determinar qué compañía cubre con los gastos, el primer paso es averiguar cuál de los vehículos implicados ha ocasionado el accidente, pues la culpabilidad de un conductor u otro indicará qué aseguradora asumirá los costes. De manera obligatoria, todos los vehículos a motor en circulación deben contar con un Seguro de Responsabilidad Civil Obligatorio, con unas coberturas que suelen variar dependiendo de si el herido es el conductor o uno de los pasajeros.

De tal manera, cuando se produce un siniestro en carretera, el conductor no culpable y el resto de ocupantes (si los hubiera) tendrán cubiertos sus costes médicos por la compañía aseguradora del vehículo responsable del accidente. Por otro lado, los pasajeros que viajaban en el vehículo culpable, quedarán cubiertos por su Seguro de Responsabilidad Civil Obligatorio, sin embargo, el conductor que ha ocasionado el accidente deberá acudir a la cobertura médica del seguro.

Partimos de la premisa de que toda póliza de seguro de coche o moto contiene una serie de coberturas básicas, siendo las principales, la cobertura técnica, la médica, la jurídica y la de daños a terceros. Es por ello, que las aseguradoras no pueden negarse a pagar un tratamiento médico, pues en principio, dicha cobertura tiene carácter contractual.

Las aseguradoras están obligadas a sufragar todos los gastos médicos derivados del accidente, tanto la asistencia en urgencias como el tratamiento que necesite el herido hasta su total recuperación. Además, debe cubrir gran parte de los gastos médicos derivados del siniestro como, por ejemplo, medicinas, collarines, férulas o, incluso, sillas de rueda o muletas. Asimismo, la compañía debe informar a la víctima sobre la posibilidad de elegir libremente el centro médico para su rehabilitación.

Es importante comprobar que nuestro seguro esté acogido al convenio de UNESPA, firmado entre aseguradoras y médicos privados para desarrollar la cobertura médica en caso de accidente de tráfico. No obstante, la sanidad pública siempre cubre a las víctimas, pero posteriormente los gastos son repercutidos sobre la compañía de seguros.

Por último, cabe destacar un caso especial que se produce cuando el conductor sufre el accidente durante el trayecto al trabajo, de vuelta a casa o dentro del horario de su jornada laboral. En dicho caso, la Seguridad Social queda siempre al margen y es la mutua laboral quien se encarga de realizar el seguimiento y el tratamiento de las lesiones.