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Cinturón de seguridad: qué lesiones puede provocar

El cinturón de seguridad es un elemento de seguridad pasiva que hay que llevar puesto siempre en el interior de un vehículo. Tener abrochado el cinturón de seguridad de manera adecuada reduce las posibilidades de muerte en un accidente de tráfico hasta en un 50%, no obstante, su actuación para evitar que salgamos proyectados contra el parabrisas puede provocar lesiones en nuestro cuerpo. 

Los daños ocasionados por el cinturón de seguridad pueden ser de mayor o menor grado según la magnitud del accidente. Se pueden sufrir quemaduras debido a la fricción, lesiones musculares o de ligamentos en la columna vertebral, fracturas en costillas, esternón o columna vertebral e, incluso, lesiones viscerales debido a las contusiones provocadas en algún órgano como el corazón, los pulmones o los intestinos.

Dependiendo del tipo de lesiones y del periodo de curación, todo controlado con informes clínicos y por un perito médico, se realizará una ‘Valoración del Daño Corporal y Medicina de Seguros’. Una vez hecha la valoración, se usará el baremo de Accidentes de Circulación para establecer la indemnización que tiene que recibir el afectado, tanto por los daños ocasionados como por las secuelas posteriores.

En el caso de que el accidente haya tenido lugar durante la jornada laboral, el afectado será indemnizado por la Mutua Laboral siguiendo el baremos de Lesiones Permanentes No Invalidantes. Además, si la persona afectada dispone de una póliza personal de seguros podrá beneficiarse de una indemnización según su baremo.

Sin embargo, todas las indemnizaciones podrán verse reducidas si se demuestra que el daño se agravó por no hacer un uso correcto del cinturón de seguridad o por no llevarlo puesto.