Blog

Los cinco fallos más comunes que no te permitirán superar la ITV

Todos los vehículos deben someterse a esta inspección técnica con el fin de verificar que son aptos para circular sin poner en riesgo tanto a las personas que van en su interior como a los demás vehículos que circulen por la misma vía. En el caso de los turismos de particulares, durante los primeros 4 años desde su matriculación están exentos de pasar la ITV, a partir de entonces y hasta los 10 años deberá pasarla cada 2 años y, posteriormente, de forma anual.

La multa por conducir sin que el vehículo haya pasado la ITV asciende a 200 euros, igualmente, es importante que si se ha superado con éxito la inspección, la pegatina debe estar siempre visible en el parabrisas; en caso de que no lo esté se considera una infracción leve que conlleva una sanción de 100 euros. También está penado circular con el vehículo, a menos que sea directamente hacia el taller, si este no ha superado la inspección acarreando una multa de 200 euros, que puede ascender hasta 500 euros si la inspección es negativa por defectos muy graves, ya que en esta situación el coche solo puede moverse remolcado por una grúa.

El portal web motor.elpais.com ha recopilado los cinco problemas más comunes por los que los vehículos no consiguen superar la inspección y cómo podemos solventarlos de manera anticipada.

- Alumbrado y señalización (27% de los defectos graves). Aunque las luces representan el principal problema de rechazo de la ITV, es lo más fácil de revisar y poner a punto. Comprueba que funcionan todas las bombillas (largas, cortas, intermitentes, marcha atrás…) antes de pasar la inspección.

- Emisiones contaminantes (21,5% de los defectos graves). Podemos revisar que el nivel de aceite esté donde corresponde, sin embargo, es más difícil saber si los niveles de gases lambda y CO2 que emite nuestro vehículo están dentro de los permitidos. Si el coche se cala a menudo o echa humo negro al acelerar, es posible que no supere esta prueba.

- Ejes, ruedas, neumáticos y suspensión (21,5% de los defectos graves). Es importante revisar previamente el estado de los neumáticos y comprobar la presión, además, es aconsejable llevarlo al taller para revisar los amortiguadores si tiene más de 100.000km.

- Frenos (9% de los defectos graves). Como conductores podemos detectar algunos síntomas que indican problemas y averías en los frenos, por ejemplo, que el pedal esté muy blando o muy duro o que el nivel de líquido sea insuficiente o su color sea muy oscuro.

- Carrocería (6,5% de los defectos graves). Si el parabrisas o los retrovisores han sufrido algún impacto, debemos asegurarnos de que no supone un problema de visibilidad. En cuanto a los golpes o abolladuras, la mejor opción es preguntar en un taller si se trata de un defecto grave o leve.